A punto de terminar este día, de ir a la cama y darle vueltas a las cosas que hicimos y dejamos de hacer, de pensar en lo que debimos de haber callado y morder las palabras que nunca dijimos, de cerrar los ojos mientras volteamos al Todo Poderoso y ajustamos cuentas.
Hoy al terminar el día y antes de dormir y comenzar mañana una nueva aventura no nos queda más que agradecerte y desearte todo el éxito habido y por haber.
Fuiste piedra angular del resurgimiento del americanismo, tus decisiones hicieron devolverle la sonrisa a los pequeñines cada vez que su papá les decía “Hoy toca ver al América”. Supiste manejar la presión a su máxima expresión y no sólo saliste con la frene en alto sino que enmudeciste hasta los más fieles “aficionados” que te daban por terminado tantas veces.
En fin, no hay nada más que agradecer, gracias Ricardo Peláez por tanto y por todo, #LinajeÁguila te lleva en el corazón.